LA NEORURAL 2017

La Neorural es la carrera de casa, una carrera diseñada por un equipo de amantes de la montaña y muy conocedores de la zona. Yo presumo de conocer palmo a palmo cada sendero que hay en la Serralada, pero año tras año Santi me sorprende recuperando antiguos senderos en desuso que ahora se convierten en una aventura selvática dentro de nuestra querida Serralada.

Mi aventura en La Neorural empieza el sábado, Santi me llamó y me preguntó si quería acompañarlos a marcar un tramo de la carrera. Como me va la marcha yo le dije que si mi mujer me daba permiso allá que iba, así que el sábado salí con Santi y otro compañero a marcar el tramo que iba desde la Font Sunyera hasta la Torre de vigilancia.

Marcando la grimpada

En la Font de la Dinamita

Domingo, suena el despertador y no las tengo todas conmigo. Las semanas antes de la carrera había salido a entrenar y mis sensaciones eran muy malas, ya que me notaba las piernas muy cargadas. El miércoles había ido a hacerme un masaje de descarga así que esperaba encontrarme algo mejor, antes de salir de casa me tomo 500ml de Aquarius para ir algo hidratado ya que iba a hacer la carrera sin mochila (algo muy raro en mi). Recojo a Jordi de camino a Sta. Maria, aparcamos en el parking habilitado al lado del cementerio, vamos hacia el pabellón a recoger los dorsales y ya nos vamos encontrando con caras conocidas como: Oriol y Adrià Prat, Yeray, Carlos, David Bonilla, Daniel, Esteve, Marc de los Oju ke Passu y con varios conocidos del mundillo del Trail Running. Nos tomamos un café y un trozo de coca que estaba buenísima y nos fuimos a cambiarnos, en esas llegó Toni junto con su entrenadora, la gran Eli Gordon. Nos fuimos con él a cambiarnos y luego salimos hacia el arco de salida para tomar posiciones para la salida.

El CEI en la Neorural

Con la Gran Eli Gordon y Toni Santana.

Se da la salida y salimos todos a la carrera, solo salir del pabellón llega la primera novedad de la carrera. Subimos por la inclinada calle que lleva a la Iglesia del pueblo, la subo sin enterarme ya que al ir con más gente voy motivado. En la bajada y el llaneo hasta Can Bernades acelero un poco el ritmo, por fin nos metemos en sendero voy trotando todo lo que puedo hasta que llega un pequeño tapón en el sendero que subía hasta la torre eléctrica debido a la inclinación del mismo. 

Trotando en el primer sendero.

Aprovecho la bajada por pista hasta la cantera para volver a incrementar el ritmo. El sendero de subida que bordea la cantera lo hago caminando a ritmo rápido ya que así avanzo más rápido. Llega la segunda sorpresa de la carrera, cuando salimos de la cantera seguimos subiendo pasando dos torres eléctricas y bajamos directos al agujero. El sendero que va del agujero hasta el dolmen lo hago a buen ritmo pero caminando para no gastar energía en exceso.

Una vez en la pista del dolmen me puse a trotar ya que venía un tramo de llano,  después enlazaba con la bajada por el itinerario de las fuentes de La Teula y el Ca hasta la Font Sunyera. En este tramo me puse a correr rápido aprovechando el divertido sendero en forma de tubo, al final del camino se empalmaba con un sendero que bajaba muy directo a la pista. En medio del sendero y escondido delante de una roca donde había que dar un salto había un fotógrafo

Pequeño salto al vacio.

una vez en la Font veo que viene mi amigo Toni Santana. Por lo visto en la piedra donde estaba el fotógrafo se había hecho daño en el tobillo, siguió unos metros pero vio que se tenía que dar la vuelta. Una lástima porque iba muy bien, proseguí mi camino y enseguida me encontré con el avituallamiento donde nos reciben con una gran sonrisa y mucha amabilidad sus voluntarios. Bebo un poco y continuo la marcha, el tramo que afrontaba estaba muy cambiado con respecto al año pasado. Ya que donde había un sendero muy frondoso, ahora había una pista ancha. Aun así eso no fue impedimento para que la dureza de la carrera aflojara, ya que en el tramo final de la pista teníamos que afrontar una subida trepando por enormes piedras y seguir subiendo hasta una nueva torre eléctrica.

Subidón trepando por las piedras.

Desde allí se descendía y se enlazaba con un sendero nuevo este año, un sendero que daba a entender la esencia de la Neorural. Terreno irregular y continuos saltos y sube y bajas por pequeños muros de piedra, con una subidita sorpresa en medio. Días atrás había pasado entrenando y más o menos sabía donde podía caminar bien o donde trotar así que tuve algo de ventaja. Al salir del sendero nuevo se enlazaba con el sendero que descendía hasta la Font de la Dinamita pasando por el tramo Vietnamita, un tramo que por su vegetación bien podría pasar por un paraje Vietnamita. Pasada la Font se salía a la pista y enseguida encontrabas el siguiente avituallamiento, esta vez decido beber dos vasos de isotónico y comerme un plátano ya que hasta el siguiente avituallamiento quedaba un mundo.

Después de subir un tramo enlazando dos senderos llegamos a la pista, 300 metros y nos desviamos hacia un sendero que desciende muy vertical. Bajo más rápido de lo que me imaginaba e incluso adelanto a un corredor, una vez he descendido me pongo a caminar para ahorrar energía de cara a la subida. Salimos a la pista y tras unos metros nos metemos de nuevo en un sendero, llega otra novedad de este año. En vez de subir directamente hacia el Puig de la Creu, nos hacen descender por un divertido sendero y subir hacia el Puig por otro sendero mucho más largo y con una inclinación considerable en el que consigo atrapar algún corredor más. Una vez arriba un pequeño descenso y la última subidita hasta llegar al Turó del Galceran, llevábamos 14 kilómetros y 1000m. de desnivel positivo y aun nos quedaba la mitad de carrera.

Me tomo un antioxidante y me pongo en marcha, desciendo por el zigzag de las viñas admirando las vistas. En la pista decido bajar trotando para no forzar y el sendero de subida lo hago caminando, una vez arriba descendemos atravesando dos senderos hasta la zona de los cerezos. Me sorprendo porque en ese tramo voy totalmente solo ya que los de delante se alejaron y los de detrás iban lejos, llego al final del sendero y empieza la temida subida del Muro. 

El muro una rampa dura de verdad.

Un ascenso por una pista muy inclinada, allí me pongo a correr espoleado por los ánimos de José María que me graba mientras subo. Una vez lo rebaso le pregunte si había dejado de grabar, cuando me dijo que si me puse a caminar ya que no quería forzar. Descendemos y enseguida nos metemos en el sendero de la emboscada, un sendero recuperado el año pasado que atraviesa por dentro del bosque hasta enlazar con el sendero que sube a la pista que lleva a la torre.

Antes de meterme en la emboscada.

Este tramo lo hago íntegramente caminando, ya que en el inicio hay alguna bajada resbaladiza y después sube bastante inclinado y no era plan de gastar energías. Una vez en la pista tocaba descender a la Font de Can Gurri atravesando el bonito sendero entre paredes, una vez pasada la fuente llegué al avituallamiento. Mientras estaba en el avituallamiento, un chico comentó que cuanto llevábamos de desnivel positivo ya que su GPS marcaba 11000m. le dije lo que llevábamos y mientras bajábamos por la pista hacia el siguiente sendero nos pusimos a hablar, se llamaba Kiko y había venido desde Mallorca. Descendimos por un sendero muy inclinado y resbaladizo hasta la tartera de Can San Pare, un lugar donde se atravesaba un pequeño sendero muy empedrado muy parecido a las tarteras de los pirineos. Tras salir del sendero y atravesar la antigua zona de acampada seguimos bajando, pasamos por el sendero que baja justo hasta la Font de la Mercè. Kiko y yo íbamos hablando de las carreras que habíamos hecho y de entrenamientos mientras subíamos por el sendero que subía hasta el antiguo lavadero de Can Barbeta, casi sin darnos cuenta llegamos a la pista y de nuevo al siguiente sendero. Mientras íbamos subiendo yo le explicaba a Kiko lo que nos quedaba, llegamos al sendero de bajada y a media bajada Kiko tuvo una aparatosa caída. Por suerte no se hizo nada y pudo continuar, seguimos descendiendo hasta llegar a la pista. Allí le dije a Kiko que ese tramo era mejor hacerlo andando para no gastar energías, mientras íbamos subiendo vimos que llegaba por detrás nuestro una chica y preguntaba si quedaba mucha subida. Le expliqué lo que quedaba y continuamos, en la bajada se nos distanció un poco, pero en la subida hacia el avituallamiento donde estaban los Koala la volvimos a enganchar.

Desde abajo ya se escuchaban los ánimos de los Koala a los corredores para afrontar una corta pero intensa subida, una vez arriba te ofrecían cerveza o bebida energética a los que no bebíamos. Kiko seguía mis pasos así que con lo que quedaba podíamos acabar juntos, descendimos por pista y senderos hasta la pista de la Font de la Mercè a buen ritmo. Una vez allí descendimos por el inclinado sendero que llevaba al prado de la casa de colonias, nos disponíamos a encarar la última subida cuando vimos que allí había un chico totalmente enrampado. A los dos pasos yo también empecé a enramparme y aquello parecía una película de risa ya que los dos nos arrastrábamos por la subida, por suerte me pasó rápido y pude encarar el último tramo de subida sin problemas. Una vez arriba solo nos quedaba llanear un tramo por sendero y descender por asfalto hasta el pabellón, así hicimos nuestra entrada triunfal Kiko y yo tras una edición BRUTAL de La Neorural.

29 kilómetros

1870 Metros de desnivel positivo

1870 Metros de desnivel negativo

3740 Metros de desnivel total acumulado

3:55 horas

En conclusión, la carrera me salió mucho mejor de lo que esperaba ya que mis sensaciones han sido muy buenas y he podido disfrutarla. Sobre la carrera tengo que decir que el recorrido es espectacular, a pesar de conocer todos y cada uno de los rincones de la Serralada siempre me sorprenden con algún sendero que desconocía. La señalización de la carrera es perfecta y no lo digo porque ayudara a marcarla eh jejeje. La organización y los voluntarios un 15 sobre 10, muy bien organizada y con unos voluntarios muy amables. Ha sido un placer conocer a Kiko y haber compartido los últimos 8 kilómetros, al ir charlando los kilómetros pasaron más rápido. Enhorabuena a los ganadores Andreu Simon y Eli Gordon por el carreron que han hecho, y felicitar a Oriol Prat por quedar cuarto de la general y primero del pueblo. Este año la carrera tenía mucho nivel, pero aparte de eso lo que la hace especial es que es la carrera que transcurre por mi zona de entrenamiento y donde puedo compartir kilómetros con los compañeros de OJU KE PASSU y el CEI CATALUNYA. Me ha alegrado ver que Jordi ha terminado su primera Neorural en un buen tiempo y que amigos como Yeray y Oriol van dejando atrás las lesiones que tanto les han fastidiado este año, una pena que Toni no pudiera acabarla por culpa del tobillo (el año que viene volveremos Toni). Agradecerle a mi mujer que viniera a verme llegar y me estuviera apoyando en la llegada, gracias por estar siempre ahí.