SUBIDA EN FAMILIA AL MATAGALLS

Domingo 23 de octubre

Hacía tiempo que mi mujer me decía que quería subir a la cima del Matagalls, pero como hacía mucho calor no encontrábamos el día ideal para subir. Después de subir a Sant Jeroni en Montserrat, me dijo que si el día 23 hacia buen tiempo ( o sea nublado) iríamos al Matagalls.

Dicho y hecho el domingo cogimos el coche y nos fuimos mi mujer (Cris) y mi suegro (Antonio) hacia Collformic. La salida la hacemos desde un panel indicativo con las marcas del Gr 5.2 (marcas blancas y rojas como todos los senderos de gran recorrido) empezamos el recorrido subiendo por unos escalones de piedra y a escasos metros pasamos junto a una cruz metálica que conmemora a los combatientes caídos en las guerras carlistas, llegamos a una pista y siguiendo las señales continuamos subiendo por entremedio de un bosquecito. Aquí ya empezábamos a notar algo de calor así que cris se quito la chaqueta para subir algo más fresca, al salir del bosque vino una zona bastante pedregosa en la cual me adelante un poco ya que me cuesta mucho caminar despacio. Cris y Antonio iban subiendo poco a poco y de vez en cuando se paraban para observar la niebla que cubría la plana de Vic

Cris y Antonio observando el paisaje

después cruzamos una pista y continuamos de frente por un sendero pedregoso que iba subiendo gradualmente hasta que llegamos al Pla de la Barraca. A nuestra izquierda pudimos observar una pequeña cima coronada por una cabaña de piedra (el Turó d’en Bessa) aquí aproveche para quitarme la camiseta de manga larga (aunque se notaba fresco, la sensación subiendo era de mucho calor) aprovechando que el camino llaneaba hicimos alguna foto y aprovechamos para hacer una pequeña parada técnica. El camino giraba hacia la derecha y nos acercaba hasta nuestro siguiente reto, el Turó Gros de Sant Andreu ( 1592m ) antes de empezar a subir vimos a nuestra izquierda una curiosa concavidad, usada antiguamente para acumular nieve durante el invierno y así aprovecharla durante el resto del año.

Llaneando por el Pla de la Barraca en direccion al Turó Gros de Santandreu

Como sabía que cris y su padre iban a subir muy despacio para no agotarse en exceso, les dije que yo subiría y después bajaría a buscarlos. Dicho y hecho subí para arriba a buen ritmo por un camino muy pedregoso y poco definido, la gente ha ido degradando el camino a medida que pillan atajos. Una vez llegué arriba me di la vuelta y fui en busca de Cris y Antonio, no tuve que bajar demasiado ya que iban despacio pero iban avanzando. Estaban a la mitad del camino y les fui indicando el camino correcto para que no tomaran ningun atajo y tuvieran que subir más de la cuenta, una vez arriba nos paramos a deleitarnos con el paisaje  y ver por primera vez la cruz que corona el Matagalls.

Afrontando el tramo final del Turó Gros

Cris en la cima del Turó Gros

Reseguimos un sendero que ya era más llano hasta que llegamos a los pies del Coll de Llops, la niebla iba yendo y viniendo en la cima del Matagalls así que a veces se veía la cruz y a veces no. La primera parte de la subida al Coll de Llops es bastante más fuerte que la segunda, hay que seguir las señales de Gr que a veces se confunden entre las rocas y el camino va ganando en elevación a cada paso.

Cris dejando una piedra

Después de una zona bastante pedregosa y al girar levemente por fin pudimos ver la cruz del Matagalls bastante cerca, ya solo nos separaba una pequeña cima  que en su tramo final Cris y Antonio se atrevieron a subir corriendo. Ya por fin en la cima del Matagalls nos hicimos las respectivas fotos junto a la Creu de Catalunya ( erigida en recuerdo de Mosén Cinto Verdaguer)

Cris y Antonio en la cima del Matagalls ( 1694 metros)

El viento azotaba con fuerza la zona así que tuvimos que abrigarnos rápidamente y buscar refugio, nos metimos en un camino que salía a la derecha de la cruz al cobijo de una ladera.

Allí no corría nada de aire y se estaba estupendamente, cogimos nuestros bocadillos y nos los comimos mientras observábamos el paisaje y como la niebla iba y venía.

Vistas que teniamos mientras nos comiamos el bocadillo

 Después de comernos el bocadillo nos dispusimos a volver, yo propuse bajar por Sant Segimon pero como no tenía muy claro por donde había que ir decidimos volver por donde habíamos venido. Al salir de nuestro parapeto el viento se dejo notar y nos dejó las manos congeladas.

Cris aguantando el frio

La bajada por el Coll de Llops se nos hizo un poco dura por el frio que teníamos en las manos pero a medida que íbamos bajando el frio iba disminuyendo. Cuando ya casi estábamos abajo del Coll observamos que subía un montón de gente hacia la cima, casi todos iban con un pañuelo rosa atado al cuello ( supusimos que eran de alguna parroquia o casal)

Mientras bajabamos observamos que subia un monton de gente

Continuamos nuestro camino y a mí me dieron ganas de mear. Como venia gente muy cerca me puse a correr y me adelante para esconderme en un montículo, seguimos y bajamos el turo gros y llegamos al Pla de la Barraca.

inicio del descenso del Turó Gros

Proseguimos hasta que llegamos a una pista y allí decidimos que en vez de continuar por el camino pedregoso y el bosque, ya que iba a ser una bajada complicada giraríamos a la derecha por la pista. Así lo hicimos y aunque dimos algo más de rodeo bajamos más tranquilos y por mejor camino,

llegamos nuevamente al tramo de escalones de piedra del principio y bajamos hasta la carretera.

Ultimo tramo hacia Collformic

Cruzamos la carretera y fuimos a por el coche, antes de salir y mientras guardábamos las mochilas. Antonio se dio un golpetazo con el capot que por suerte solo fue un golpe.

8,5 kilómetros

636 metros de subida

En conclusión, la caminata ha sido una salida en familia. Mi mujer a pesar de no andar normalmente se ha portado bastante bien ya que aunque despacito ha subido sin problemas. Mi rodilla me ha molestado al ir más despacio de lo normal pero las 2 veces que he ido un poco mas rápido parece que no me ha molestado mucho.